La compañía eléctrica estatal de Etiopía ha firmado recientemente acuerdos con 21 empresas mineras de bitcoin, lo que supone un importante paso adelante en el posicionamiento de la nación africana como floreciente centro de operaciones mineras de bitcoin. Estas asociaciones estratégicas no sólo subrayan la emergencia de Etiopía como actor global en el sector de la minería de bitcoins, sino que también anuncian una prometedora vía para reforzar sus reservas de divisas.
Según un informe de Bloomberg, Nuo Xu, fundador de la Asociación China de Minería Digital, cree que la colaboración de Etiopía con los mineros de bitcoin, unida al inicio operativo de la Gran Presa del Renacimiento Etíope (GERD), está preparada para atraer un interés considerable de las empresas mineras chinas. Se prevé que esta confluencia de factores eleve el estatus de Etiopía como destino preferente para los inversores chinos que se interesan por el mercado de las criptomonedas.
Desde una perspectiva más matizada, cabe destacar que entre los 21 mineros de bitcoins con acuerdos de suministro de energía asegurados en Etiopía, una asombrosa mayoría procede de China, con sólo una representación marginal de entidades no chinas.
A pesar de las afirmaciones que sugieren una priorización de la generación de divisas sobre las preocupaciones medioambientales expresadas por los activistas climáticos contrarios al bitcoin, las ideas de Nemo Semret, director general de QRB Labs, sugieren lo contrario. Semret afirma que Etiopía cuenta con un estricto marco normativo y destaca el riguroso proceso de investigación emprendido por el gobierno en los últimos dos años para garantizar el cumplimiento de la normativa en el floreciente sector de las criptomonedas.
La postura proactiva del gobierno etíope, dirigido por el Primer Ministro Abiy Ahmed, es evidente en la emisión de directivas destinadas a regular los criptoproductos, incluidas las actividades de minería. Este enfoque proactivo subraya el compromiso de Etiopía de fomentar un entorno normativo propicio, aprovechando al mismo tiempo los beneficios económicos potenciales de la industria de las criptomonedas.
De cara al futuro, la sostenibilidad de las operaciones de minería de bitcoin en Etiopía sigue siendo objeto de especulación. Sin embargo, los abundantes recursos hidroeléctricos facilitados por el GERD son prometedores para mitigar las preocupaciones en torno al impacto medioambiental de la minería de bitcoins, a menudo criticada por su dependencia de fuentes de energía no renovables.
Además, las ventajosas características geográficas de Etiopía, como la elevada altitud de su capital, Addis Abeba, situada a 2.400 metros sobre el nivel del mar, ofrecen condiciones favorables para las actividades mineras. Esto, unido a unas temperaturas medias moderadas, posiciona a Etiopía como un competidor formidable en el panorama mundial de la minería de bitcoins, rivalizando potencialmente con centros establecidos como el estado estadounidense de Texas.