Trump aboga por la minería de bitcoin en EE.UU. tras reunirse con líderes del sector

Donald Trump ha reafirmado su apoyo a la industria minera de Bitcoin. El miércoles, fue anfitrión de una reunión con altos ejecutivos de varias empresas de minería de criptomonedas de Estados Unidos.

En un post publicado el 11 de junio en su plataforma Truth Social, Trump expresó su deseo de que todo el Bitcoin restante sea «¡¡¡FABRICADO EN EEUU!!!». Argumentó que esta iniciativa contribuiría a que el país alcanzara el «dominio energético.»

Trump también describió Bitcoin como la «última línea de defensa» de la nación contra la implementación de una moneda digital del banco central (CBDC). A pesar de ello, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, declaró en marzo que Estados Unidos está lejos de considerar, y mucho menos de adoptar, una CBDC en cualquiera de sus formas.

En la reunión celebrada en la residencia de Trump en Mar-a-Lago (Florida) participaron personalidades como Jason Les, consejero delegado de Riot Platforms, Brian Morgenstern, responsable de políticas públicas, Matthew Schultz, presidente ejecutivo de CleanSpark, y Amanda Fabiano, miembro de la junta directiva de TeraWulf.

Fabiano comentó que el grupo debatió cómo la minería de Bitcoin podría ayudar a reforzar la red eléctrica y fomentar la creación de empleo. Hizo hincapié en los beneficios potenciales de la industria en términos de infraestructura energética y oportunidades de empleo.

Schultz dijo a Bloomberg que Trump prometió su apoyo al sector minero Bitcoin si es elegido presidente en noviembre. Destacó el compromiso de Trump con la industria y el impacto positivo que podría tener bajo su liderazgo.

Fabiano señaló que la industria minera de Bitcoin se ha enfrentado a importantes retos políticos debido a la desinformación y a las narrativas erróneas. Subrayó la necesidad de que los políticos se informen sobre los beneficios de Bitcoin y sus procesos de minería.

En la actualidad, el sector está sometido a presiones políticas por propuestas como la del Presidente Joe Biden de gravar con un 30% la electricidad de los mineros de Bitcoin. También hay preocupaciones constantes sobre las emisiones de la industria, el consumo de energía y su impacto potencial en las redes eléctricas.

Aunque Trump calificó Bitcoin de estafa durante su presidencia en 2021, desde entonces ha modificado su postura. Este cambio parece ser un esfuerzo por obtener el apoyo de los ahora influyentes grupos de presión de la industria a medida que se acercan las elecciones presidenciales de 2024.

Trump ha subrayado recientemente que Estados Unidos no debe conformarse con un «segundo puesto» en el ámbito de la criptodivisa. A principios de junio, incluso se autoproclamó «criptopresidente».

En un intento de apoyar su campaña presidencial, Trump ha empezado a aceptar donaciones de criptodivisas y recientemente organizó una cena para los poseedores de sus tokens no fungibles (NFT) Mugshot.

El 10 de junio, Trump tuvo su primera reunión con un oficial de libertad condicional después de haber sido declarado culpable de 34 delitos graves por falsificar registros comerciales el 30 de mayo. La entrevista virtual, realizada desde su complejo turístico de Mar-a-Lago, fue breve y sin incidentes, y duró menos de 30 minutos, según fuentes citadas por The Hill.