En medio de una batalla legal en curso con la Comisión de Bolsa y Valores (SEC), Ripple está afinando su enfoque en su gama de ofertas de criptomoneda. Este giro estratégico se pone de relieve por el anuncio de la compañía de su intención de introducir una stablecoin en el mercado.
Esta próxima stablecoin, que se prevé que sea presentada a finales del año 2024, tendrá su valor vinculado a una combinación de activos que incluyen depósitos en dólares estadounidenses, valores del gobierno de EE.UU. a corto plazo y otras formas de equivalentes de efectivo. CoinDesk informó de ello el 4 de abril.
El plan de Ripple implica el lanzamiento inicial de la stablecoin en dos grandes plataformas de blockchain: el XRP Ledger y el blockchain de Ethereum, utilizando el reconocido estándar de tokens ERC-20 que ofrece Ethereum. El grupo demográfico objetivo de la compañía para este token incluye clientes de nivel empresarial e instituciones financieras.
“Creemos que lo que nos va a diferenciar es el hecho de que los activos van a ser en dólares, bonos del Tesoro, sólidos como una roca. No tratamos de exprimir el último par de decimales. Queremos conquistar el mercado y estar en él a largo plazo”, afirma David Schwartz, Director de Tecnología de Ripple.
El Director de Tecnología de Ripple, David Schwartz, ha destacado la importancia de la transparencia en el despliegue de esta nueva stablecoin. La transparencia ha sido un tema polémico entre los emisores de stablecoins en el pasado, y Ripple pretende convertirla en una piedra angular de su estrategia en esta nueva aventura.
La decisión de seguir adelante con la iniciativa stablecoin, a pesar de las actuales complicaciones legales de Ripple con la SEC, es en parte oportunista. Ripple reconoce la evolución de la dinámica del mercado y el potencial para hacerse un hueco en medio de formidables competidores como USDT de Tether y USDC de Circle.
Efectos sobre Ripple y su token XRP
Schwartz ha postulado que la introducción de la stablecoin de Ripple podría rejuvenecer significativamente el panorama de las finanzas descentralizadas (DeFi) dentro del ecosistema del ledger XRP. Aunque el ledger cuenta con una bolsa descentralizada (DEX), su utilización ha sido relativamente modesta en comparación con otras redes blockchain.
También existe una creciente curiosidad sobre cómo esta stablecoin podría influir en las ofertas existentes de Ripple, especialmente el token nativo XRP. Aunque un veredicto legal ha aclarado que XRP no es un valor, su valor de mercado no ha experimentado un movimiento significativo. Este estancamiento se atribuye a menudo a los efectos persistentes de los procedimientos legales en curso.
El lanzamiento de una stablecoin de Ripple podría, sin embargo, servir como catalizador para mejorar tanto la utilidad como la liquidez de XRP, vigorizando potencialmente la confianza del mercado en el token.
En la última actualización, el precio de mercado de XRP era de 0,59 dólares, lo que supone una subida de aproximadamente el 3% en el periodo de 24 horas anterior. El rendimiento del activo durante la semana muestra un patrón de consolidación, con un ligero descenso de poco más del 3% observado en los últimos siete días.